Correa sobre acusaciones de Lenín Moreno: «Los golpistas han sido ellos»

El expresidente de Ecuador Rafael Correa ha comentado este martes, en entrevista con RT, su punto de vista sobre la situación de Ecuador, país que sufre una intensa oleada de protestas contra el Gobierno de Lenín Moreno, a raíz de la aprobación una serie de medidas económicas que podrían derivar en un notorio recorte de los derechos de los trabajadores.

Además, el exmandatario ha podido responder a las acusaciones que Moreno ha vertido contra él y contra Nicolás Maduro, al asegurar que ambos están detrás de las manifestaciones y los disturbios, que no cesan desde la semana pasada.

Correa ha señalado, en primer lugar, que las declaraciones del presidente ecuatoriano son «una muestra de la enajenación que tiene Moreno en todo su Gobierno», y le ha reprochado que le culpen a él, constantemente, «del mal manejo económico, del crecimiento de la inseguridad y del fracaso de todas sus políticas». En cualquier caso, Correa señala que «ya nadie puede creer» las afirmaciones de Moreno, porque su actitud «ya es realmente locura».

Rafael Correa

@MashiRafael

 

¿Coincidencia la cadena de Moreno echándole la culpa de todo a los “correistas”, y el “ataque” a Contraloría?
¡Que nadie se engañe! Seguramente es otra operación del Gobierno para desviar la atención.
¡Ya nadie les cree!! https://twitter.com/mariapaularomo/status/1181440655488368641 

María Paula Romo

@mariapaularomo

 

Primera vez en nuestra historia que una “marcha” va a la Contraloría General del Estado.

Aunque lograron hacer algunos destrozos, la @PoliciaEcuador resguarda en este momento el edifico y lo que se encuentra dentro.#EstoNoEsUnParo

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«Los que robaron la democracia son ellos»

«Dicen que somos golpistas y que queremos desestabilizar al Gobierno», denunció Correa, que se muestra convencido de que «los golpistas han sido ellos, que han roto la Constitución cuantas veces les ha dado la gana». El expresidente señaló que a sus adversarios políticos «no les interesa la democracia: les interesa seguir controlando el poder, controlando al pueblo ecuatoriano» para poder aplicar unas políticas «que perjudican a las grandes mayorías pero benefician a sus negocios». «Los que robaron la democracia son ellos», sentencia al respecto.

Correa ha señalado en todo caso una «salida constitucional» para esta situación, y en su opinión no es otra que «anticipar las elecciones y que el pueblo vote». «Así se resuelven los conflictos en democracia: en la urnas», insistió el exmandatario.

Rafael Correa también ha comentado la manera en que los medios de comunicación hegemónicos están relatando lo sucedido en Ecuador. A su juicio, el comportamiento de estos medios es «vergonzoso». «Es obsceno cómo ocultan la represión –indica Correa–: el país sufre una tremenda conmoción y ellos siguen pasando telenovelas y dibujos animados».

Las acusaciones de Moreno 

En concreto, Moreno había declarado textualmente que «el sátrapa de Maduro ha activado junto con Correa su plan de desestabilización», y describió a ambos políticos como «corruptos» y evasores de la Justicia. «Ellos son quienes están detrás de este intento de golpe de Estado», aseguró el presidente, subrayando que las personas que incitan a la violencia son en realidad «individuos externos pagados y organizados».

Moreno, además, ha anunciado el traslado de la sede gubernamental de la capital, Quito, a la ciudad de Guayaquil, en el suroeste del país. «Me he trasladado a la ciudad de Guayaquil y he trasladado la sede de Gobierno a esta querida ciudad, de acuerdo a las atribuciones constitucionales que me competen», aseguró el mandatario.

Fuertes protestas

El Gobierno de Ecuador enfrenta una fuerte contestación social en todo el país, con disturbios en varias ciudades, desde que anunció el martes de la semana pasada una serie de medidas y reformas económicas que sus detractores denominan ‘el paquetazo’.

Como reacción a esa oleada de manifestaciones, el mandatario ecuatoriano decretó el pasado jueves el estado de excepción en todo el país, que continúa vigente.

Uno de los detonantes de la reacción popular contra el Gobierno fue el Decreto Ejecutivo 883, con el que las gasolinas extra y ecopaís pasaron de costar 1,85 doláres a 2,39 por galón; mientras, el diésel subió de 1,03 dólares a 2,29 (123 %). Además de este notorio incremento del precio de los combustibles, las medidas adoptadas por el presidente Moreno incluyen un paquete de reformas económicas y laborales que podrían reducir sustancialmente sus derechos de los trabajadores.

La disposición del estado de excepción por parte de Lenín Moreno es motivo de preocupación para organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que se han mostrado críticos tanto con la suspensión de libertades y derechos que conlleva, como con el «uso excesivo de la fuerza» que han observado por parte de la Policía.