Desabastecimiento de gasolina se convierte en la primera dificultad del gobierno de López Obrador

El combate decidido al sistemático robo de combustible en México, que ha derivado en un grave desabastecimiento de gasolina, es la primera gran situación del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien anunció este lunes que se intensificará la vigilancia en los ductos.

“En esencia se va regularizando el abasto, la tendencia es que pronto vamos a regresar a la normalidad”, sostuvo durante una rueda de prensa el mandatario, quien agradeció la labor de los 5.000 militares y policías destinados a resguardar los ductos de combustible.

López Obrador que asumió la Presidencia el pasado 1 de diciembre, anunció asimismo que “se va a intensificar la vigilancia” de los ductos para erradicar por completo el robo de combustibles, que cifró en 65.000 millones de pesos (3.396 millones de dólares) anuales.

El líder izquierdista celebró que hasta ahora se han logrado frenar los sabotajes contra el ducto que transcurre entre Tuxpan, puerto del Golfo de México por donde llega la mayor parte del combustible que importa México, y Azcapotzalco, en la capital mexicana.

Además, el Gobierno mexicano informó este lunes que está investigando la participación de funcionarios públicos en el robo de combustibles, actividad con la que se habrían blanqueado 10.000 millones de pesos (522,5 millones de dólares).

Esta crisis ha provocado un déficit de 93.000 barriles diarios de gasolinas, según informó Pemex, aunque destacaron que el robo se ha reducido drásticamente, de 126.000 a unos 3.000 barriles diarios.