«Pantera negra» genera entusiasmo y orgullo entre los espectadores africanos

De Kenia a Nigeria, la llegada esta semana a las salas de cine de la última obra de los estudios Marvel, «Pantera Negra», genera entusiasmo entre los espectadores y el sentimiento de que Hollywood por fin llenó un vacío.

Pantera Negra no es solo el primer superhéroe africano de la serie Marvel con película propia, sino que además lidera el reino imaginario de Wakanda, que logró explotar un raro mineral, el vibranium, para convertirse en la nación más desarrollada y avanzada tecnológicamente del mundo.

«El hecho de que los estudios Marvel puedan presentar una película totalmente basada en personajes africanos es una toma de posición muy importante respecto al resto del mundo. Sienta muy bien y nos liberará de ciertos estereotipos sobre los africanos», celebró el actor keniata Moses Odua, de 41 años.

 

– ‘Más allá de la película’ –

«Recuerdo que mientras veíamos el filme tuvimos la sensación de estar viviendo un momento histórico. Va mucho más allá de la película», dijo Brian Barasa, keniata de 29 años que tuvo la suerte de ver la cinta antes que el resto del mundo, en una proyección privada con amigos.

El director del largometraje, el afroestadounidense Ryan Coogler, y los actores, en su mayoría africanos, eran conscientes de su responsabilidad, como explicó la intérprete Sope Aluko, una de los cinco nigerianos del elenco.

«Cuando rodábamos sabíamos que teníamos una responsabilidad con África y con la comunidad negra en general. Pero no me esperaba esto ni de lejos, todo el entusiasmo de la comunidad negra», confió a la AFP la actriz durante el preestreno en Lagos, el pasado miércoles.

En realidad T’Challa, el rey de la nación imaginaria de Wakanda, no es el primer superhéroe afrodescendiente del universo Marvel que salta a la gran pantalla, recuerda Brian Barasa, cofundador del Nairobi Comic Convention, un festival anual que se celebra desde 2014 con aficionados de los superhéroes y los universos fantásticos.

 

«Pantera Negra» ya superó a grandes éxitos de taquilla como «Los juegos del hambre» o «La Bella y la Bestia» en las preventas de entradas en Estados Unidos. A la espera de las críticas del público a la cinta, esta ya ganó la apuesta de «presentar la cultura africana desde un punto de vista positivo», resumió Jinna Mutun, directora keniana de 29 años.