Investigación de Mánchester avanza con detenciones «significativas»

La policía británica tildó este jueves de «significativas» las detenciones realizadas en la investigación del atentado de Mánchester, al tiempo que Londres trasladaba a Washington su malestar por las filtraciones sobre el caso.

«La detenciones que hemos efectuado son significativas, y los primeros registros de los lugares han aportado objetos que creemos que son de gran importancia para la investigación», dijo a la prensa el comandante de la policía de Mánchester, Ian Hopkins.

Dos hombres fueron arrestados este jueves, elevando a ocho el total que están detenidos en el Reino Unido, más el padre y el hermano del principal sospechoso de colocar la bomba, Salam Abedi, muerto en el atentado, que fueron detenidos en Libia.

En cambio, la mujer detenida el miércoles fue liberada sin cargos.

La primera ministra británica Theresa May dijo este jueves que pedirá al presidente estadounidense Donald Trump que no se filtre la información compartida con Washington sobre el atentado de Mánchester.

«Dejaré claro al presidente Trump que la información de inteligencia que comparten nuestros cuerpos de seguridad debe ser protegida», dijo May antes de viajar a una cumbre de la OTAN.

El sospechoso hizo escala en Alemania 

Poco a poco va reconstruyéndose el itinerario del autor del atentado, Salman Abedi, hasta su muerte en el Manchester Arena.

Abedi, de 22 años, hizo una escala en la ciudad alemana de Düsseldorf, indicó el jueves la policía de ese país.

«Según el estado actual de las investigaciones, el sospechoso hizo una escala en el aeropuerto de Düsseldorf para cambiar (de avión). Pasó un corto momento en zona de tránsito vigilada», explicó la policía local, sin más precisiones sobre la fecha de la escala o la procedencia del joven de origen libio.

Según explicó a la AFP un allegado de Abedi, el joven estuvo en Libia hasta cuatro días antes del atentado, cuando emprendió viaje a Mánchester.

Varios medios británicos explicaron que el padre de Abedi le había requisado el pasaporte para evitar que hiciera una tontería, pero el hijo consiguió que se lo devolviera asegurándole que iba a viajar a La Meca.